Paseando Entre “Querer” y “Amar”

Amar y querer son dos verbos poderosos
Ambos vuelven el cuerpo dichoso y furioso
Se vuelven cavilaciones, son dulces adicciones
Ambos son gestos que dedican canciones.

Uno quiere con los ojos, las manos y los besos
Pero ama con el tiempo, el sol, y los sueños
Uno quiere entre flores, palabras y sábanas
Pero ama con la existencia, compromisos y almas.

Porque amar es querer con privilegios
Querer hicha el sexo, amar hincha el pecho
Amar es querer un alma en destellos
querer es amar por encimita y a lo lejos.

Entonces llegas tú, modesta, pero altiva
te haces presente, manteniéndote esquiva
como quien quiere pero no se atreve
te haces ausente, jugando con mi mente.

Te paseas entre el querer y el amar
Vives en el limbo de mis pensares al azar
Cuando me des tus miradas, tu tacto y tus deseos
Decidiré si te entrego mis días, mi alba y mis anhelos.

Hielo

Érase una vez un trozo de hielo
que navegaba sobre tu piel
no era grande ni pequeño
siempre aventurero y risueño.

En tu cuello las bocas con sabor a miel
lo acaparaban, lo acariciaban, lo desvestían
tus senos lo mimaban, tu cintura lo albergaba,
tu ombligo lo manoseaba, tu sexo lo abrigaba.

Y aquel frio trozo se volvió lengua
y tú, como el hielo, te volviste delirio y humedad.